Circuncisión (masculina)
La circuncisión es un procedimiento quirúrgico en el que se extirpa la piel que cubre la punta del pene. Se realiza principalmente por razones religiosas, culturales, de tradición familiar o de cuidado preventivo de la salud. Además, puede ser necesario por motivos médicos, como cuando el prepucio es demasiado estrecho y causa dificultad para retraerlo sobre el glande. La circuncisión puede ofrecer beneficios para la higiene, reducir el riesgo de infecciones urinarias, infecciones de transmisión sexual, problemas del pene y cáncer de pene. Sin embargo, también existen riesgos asociados, como sangrado, infección y posibles complicaciones en el prepucio. El procedimiento se puede realizar en recién nacidos y en personas más grandes, requiriendo anestesia local o general según el caso.
Después de la circuncisión, la recuperación generalmente toma de 7 a 10 días, durante los cuales pueden presentarse molestias, enrojecimiento e hinchazón en el pene. Es importante mantener una buena higiene durante la cicatrización y cambiar regularmente el vendaje o usar vaselina para evitar que se pegue en el pañal.
Fuente: Ampliar en la fuente del artítuclo